Sin duda alguna que en este 2018 el caso Odebrecht en nuestro país promete capítulos y más capítulos al puro estilo de una novela de antaño. Toda la clase política, así como ex presidentes de la República, ex funcionarios gubernamentales se encuentran alertas ante lo que recién empezó a conocerse. La corrupción y sus tentáculos, llegó a niveles insospechados con la presencia de esta empresa brasileña en nuestro Perú, incluida la región Cusco.

Cabe precisar que Odebrecht facturó aproximadamente 35 mil millones de soles haciéndose de obras, previo pago de dádivas conociéndose oficialmente que desembolsó un promedio de 29 millones de dólares para el pago de sobornos.

Al conocerse la punta de la madeja, los escándalos empezaron a romper ópticas y reglas pues tres ex gobernantes de nuestro país están implicados en esta historia truculenta al extremo de que aún el 2017 empezaron a desfilar no solo por comisiones investigadoras del Congreso sino del propio Ministerio Público.

Efraín Pozo Sosa, un reconocido abogado y analista político en un examen exhaustivo se plantea muchas interrogantes; entre ellos: ‘¿Estamos los peruanos preparados para la hecatombe que se viene cuando se vaya identificando a los delincuentes que se coludieron con Odebrecht? ¿Tenemos un Ministerio Público, honesto, capaz, patriótico o un Poder Judicial en las mismas condiciones? ¿Esos magistrados que entraron por la ventana y que son incapaces obrarán bien? ¿Se sancionará realmente a todos los coimeros que perpetraron el más grande agravio al país? ¿La prensa peruana podrá dar cuenta de las persecuciones, aún contra los propietarios de los medios de comunicación que son cómplices de la corrupción y encubren atrocidades como la de (Jaime) Saavedra (ex ministro de Educación, implicado en la compra irregular de computadoras)?¿ Admitirán su responsabilidad los coimeros cualquiera sea su rango o activarán sus sucios mecanismos de defensa, sobornando a la justicia y a los medios de comunicación? No se olviden que ningún partido político, ninguno, por lo que hasta ahora se sabe, está exento de la corrupción de Odebrecht; ¿Podremos soportar los peruanos que sean encerrados los líderes más importantes del país? A mí me parece (sostiene Pozo Sosa) que nos harán el avión algunos y que las consecuencias de tener un Ministerio Público veleta y un Poder Judicial incapaz y deleznable, nos pasará factura. Tampoco se olviden que ya están en la cárcel, los grandes potentados de Petrobras y Odebrecht y, que los ex presidentes de Brasil están con un pie en la cárcel y que igual sucede con 12 mandatarios del mundo. Gran Bretaña, Suiza y Estados Unidos, pueden reivindicarse controlando que los delincuentes no escapen esta vez. Ni siquiera el año 2017 terminaremos con el mismo presidente, habrán sectores que no soportarán las maquinaciones debajo de la mesa, jueces y fiscales que pagarán deudas o compromisos contraídos; sin embargo, tenemos que resistir con hidalguía por nuestro amado Perú y ayudar todos a que se juzgue y se condene a los corruptos, pues es ahora o nunca’.

Y razón no le falta al analista político Efraín Pozo pues solamente en el Cusco también tenemos a un grupo de ex autoridades y ex funcionarios seriamente implicados en los negociados de Odebrecht. El caso de la Vía de Evitamiento es un claro ejemplo.

Esa obra debió costar máximo 297 millones 975 mil 952 soles pero al término de la misma el precio se elevó a 410 millones. Además se confirmó que Odebrecht pagó una coima para hacerse de esta importante obra cusqueña.

Finalmente, tenemos claro que la investigación es de naturaleza reservada pero hay aspectos que el Ministerio Público puede señalar por ser de interés público en los siguientes días porque afecta el dinero del Estado y se debe sancionar a las personas responsables, caiga quien caiga. Así sea.

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Source: El Sol