No se trata de una idea descabellada; por el contrario, nos parece que ya es hora de ponerle un pare a tanta improvisación y salidas políticas a un sueño largamen­te anhelado por más de 40 años en el tema Aeropuerto Internacional de Chinchero (AIC). Y la propuesta ha sido impulsada desde un penal en Lima por el ex presidente regional Jorge Acurio Tito en una carta abierta al pueblo cusqueño.

Él ha señalado que ante “tanta improvisación e informa­lidad del Gobierno del Cambio, sugerimos se nombre una comisión de alto nivel de la región de Cusco a fin de ges­tionar nuestra inclusión como parte de las acciones, la reestructuración de un nuevo concurso público que debe llamarse en forma paralela a la solución del conflicto con Kuntur Wasi.

Es decir lograr que el Gobierno Regional tenga un 25% de acciones por el aporte del terreno que día a día va subiendo su precio, el Gobierno Central el otro 25% y el operador aeroportuario el otro 50% en una lógica de manejo público-privado.

Es momento ya de decir las cosas, de recuperar el tiem­po perdido y sobre todo nuestras inversiones a través de incorporarnos en las acciones del proyecto, lo cual nos puede generar utilidades poner obras de bien social y hacerlo sostenible económicamente, convirtiéndose el Aeropuerto de Chinchero en una fuente de ingresos per­manentes para nuestra gente”.

Y razón no le falta al ex mandatario regional pues ya es hora de que el actual gobernador Edwin Licona asuma acciones concretas para este fin.

En ese contexto, exigimos tal como lo señala Acurio Tito que el actual mandatario regional “luche por lograr que el Aeropuerto de Chinchero sea una realidad con el agrega­do de que sea sostenible económicamente en el tiempo para el bien y progreso de todos los cusqueños. Sabemos que al dejar el cargo lo perseguirán políticamente y judi­cialmente aquellos que no hacen por el Cusco, pero más vale esperarlos de pie que arrodillado, eso debe ser la consigna de todo buen cusqueño”.

No olvidemos que “después de tantas luchas y sacrificio del pueblo del Cusco, se logro comprar 367 hectáreas de terreno con su propio dinero, sanearlos física y le­galmente, quitarles las interferencias, conseguir el re­asentamiento voluntario (DACRI) de los comuneros de Racchiayllu, Yanacona y Ayllupongo y con ello la licencia social para finalmente transferirlos gratuitamente al Go­bierno Central y así concluir con el estudio de factibilidad (ALG – Española) dejándole expedito al año 2013 con todos los permisos y licencias de la entidades competen­tes como la OACI, la Dirección General de Aeronáutica, la Dirección General de Proyectos de Inversión (DGPI) del Ministerio de Economía y finanzas Pro-Inversión y otros. Todo con la única y sana intención de potenciar la indus­tria sin chimenea que caracteriza a la Región del Cusco como es el turismo y la cultura a través de una puerta de conexión directa del Cusco al Mundo.

A partir del 2014 para adelante, no fuimos capaces de comprometernos como Gobierno Regional directamen­te desde el concurso público (marzo del 2014) para la concesión del Aeropuerto de Chinchero, cuando aquel entonces se presentaron tres Consorcios para el diseño, construcción, financiamiento y operación del nuevo ae­ropuerto, entre los cuales ganó el Consorcio Aeroportua­rio Kuntur Wasi con una propuesta salida del sombrero de un mago misio porque hoy entendemos que su única virtud fue aprovecharse de los vacíos de la bases y la proforma del contrato publicado en esta pues increíble­mente las bases pedían solo una declaración jurada de solvencia económica, sin ningún documento formal de respaldo financiero de alguna entidad de primer orden. El tiempo se encargó de desnudar esta cruda realidad pues al cierre financiero (última etapa, antes de iniciar la construcción), quisieron voltear la torta a través de una adenda (80% Estado, 20% privado) traído de los cabellos (…). Estemos alertas para lograr que el AIC sea realidad tal como señala Jorge Acurio, “desde cualquier trinchera, pues el que ama a su tierra y su gente procu­rará el bien de los demás”.


Source: El Sol