Crece el rechazo en diferentes sectores de la región Apurímac por los denigrantes comentarios que hiciera el consejero electo de Alianza para el Progreso por Chincheros, Pascual Huamánñahui, durante una reunión política con el candidato regional por Llankasun Kuska, Baltazar Lantarón, quien se alista a participar en la segunda vuelta para el 9 de diciembre próximo.
En un video grabado desde un celular y que fue colgado a la red social hace unos días, se observa a Huamánñahui Alegría dirigiéndose a Baltazar Lantarón quien sostiene un ramo de flores durante un encuentro político realizado en la mencionada provincia apurimeña.
“Tengo una apuesta con el profesor Lantarón (dice Pascual Huamánñahui) …si no cumple con sus palabras y promesas con todos los apurimeños yo como consejero le voy a quitar su mujer; pero si hace las cosas bien y cumple, yo le voy a dar a mi mujer…”, espetó el consejero, mientras sus afirmaciones eran aplaudidas por los asistentes, incluyendo una mujer que se le escucha decir “qué gane”, “qué gane”, en alusión al candidato regional.
Por su parte Baltazar Lantarón lejos de aclarar la denigrante apuesta en su momento, por el contrario, festejó con los demás asistentes lo afirmado por el misógino consejero y dejando en evidencia que esa reunión se trataba de una alianza electoral con miras a la segunda vuelta.
Hace unas horas, la Federación de Mujeres de la Región Apurímac (Femura), a través de un pronunciamiento público expresó su indignación y rechazo a la cultura de violencia hacia las mujeres que, maquilladas de bromas, refranes y comentarios diversos difunden la idea que las mujeres son seres inferiores y no tienen derechos ni merecen el respeto.
“Instamos a las instancias institucionales del Estado que tienen injerencia en el tema, a pronunciarse o desarrollar acciones de investigación y sanción frente a estos hechos inaceptables”, precisa el pronunciamiento.
Historial machista. Pascual Huamánñahui actualmente enfrenta un proceso judicial por peculado doloso (cuando fue alcalde en Chincheros) el mismo que se encuentra en etapa de apelación.
Sin embargo, lo que salta a la vista es que en su hoja de vida aparecen dos sentencias declaradas. La primera del año 1997 por demanda de alimentos, llegando según el mismo documento, a un acuerdo por homologación de transacción.
Y la segunda sentencia, también por demanda de alimentos (al parecer es de otro compromiso) del año 2003 con acuerdo conciliatorio. Ambos casos fueron vistos en el Juzgado de Paz Letrado de Chincheros.
Source: Correo
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