El Gobierno Regional de Cusco, en respuesta al reciente fenómeno de movimientos sísmicos, que impactó a distritos de la Provincia de Quispicanchi, ha puesto en marcha nueva entrega de bienes de ayuda humanitaria, concerniente en alimentos de primera necesidad. Esta acción se realiza en cumplimiento al Decreto Supremo N°050-2024 PCM que ha declarado el estado de emergencia, afectando a más de 8000 personas y más de 2500 familias damnificadas, por impacto de sismo.

El distrito más afectado y con mayor cantidad de damnificados es Andahuaylillas, con más de 5000 personas; en un esfuerzo coordinado con las autoridades locales e INDECI a nivel nacional; se ha dispuesto una nueva entrega de alimentos, que tiene un total de 19 toneladas, distribuidas a la población afectada y damnificada de Andahuaylillas.

Cabe precisar que los Bienes de Ayuda Humanitaria (BAH), se ha distribuido incluso antes de la declaratoria oficial de emergencia, a los distritos de Andahuaylillas, Lucre y Huaro de la Provincia de Quispicanchi.

El Director Regional de Gestión del Riesgo de Desastres y Seguridad, Miguel Oscco, ha manifestado que. “con la Declaratoria de emergencia; se ha logrado optimizar los procesos administrativos y obtener un mayor apoyo humanitario, que incluye provisiones de techo y abrigo”, asimismo en los próximos días, se realizará la entrega de más de 40 toneladas métricas adicionales de alimentos a los distritos de Huaro, Lucre y Urcos.

En coordinación con diversas instituciones, como el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, la Dirección Desconcentrada de Cultura, el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social y la Gerencia Regional de Salud; se están trabajando en proyectos de reconstrucción, desarrollo social, además se desplegó equipos médicos para brindar atención tanto médica como de salud mental, con el objetivo de mitigar el impacto psicológico causado por este desastre natural.

La Oficina Regional de Gestión del Riesgo de Desastres y Seguridad, a través del COER; recomienda a la población organizarse y estar alerta ante cualquier comunicación de las autoridades locales, frente a fenómenos sísmicos; asimismo se exhorta a mantener la calma y portar la mochila de emergencia.