Paucartambo, Quispicanchi y Chumbivilcas son las más afectadas

La minería ilegal avanza sin control en el ámbito regional del Cusco. Un ejemplo claro es la zona selvática de la provincia de Quispicanchi a donde han llegado inescrupulosos mineros que han dejado la selva de Madre de Dios y Puno para invadir y destruir territorio cusqueño.

Según datos que maneja la Dirección Regional de Energía y Minas del Cusco, aproximadamente cinco mil mineros ilegales arrasan bosques enteros con maquinaria pesada. Los distritos que sufren la invasión de los ilegales son Camanti, Carhuayo y Quincemil.

Del mismo modo, estos mineros ilegales han instalado sus centros de operación para la extracción de minerales en las provincias de Paucartambo y Chumbivilcas.

Frente a esta delicada situación, el Ministerio Público y la Policía intensificarán los operativos de interdicción y destruirán los campamentos en donde se extraen los minerales.

Desde la dependencia regional han señalado que el Ministerio Público ha formalizado denuncias contra los mineros ilegales.

“Nuestro personal hace la verificación in situ y se remiten informes a la Fiscalía especializada en materia ambiental. Nuestra competencia no es hacer las interdicciones”, aclaró nuestra fuente.

Sobre los mineros informales, explicó que en la región hay 2 mil 299 mineros que están en proceso de formalización. De este número, sólo cinco culminaron todos los requisitos.

La reducida cifra se debe a la desidia de los mineros y trabas administrativas para la autorización del uso superficial de terreno que es otorgado por las comunidades.


Source: El Sol