Por: Lic. Enrique Aguirre Castro

Los cusqueños, no tenemos representantes en el Con­greso de la Republica, porque el Artículo 93 de la Cons­titución Política, manifiesta que los congresistas de este parlamento unicameral: “Representan a la Nación”, y por tanto no están sujetos a mandato imperativo ni interpelación y, no son responsables ante autoridad ni órgano jurisdiccional alguno por las opiniones y votos que emiten en el ejercicio de sus funciones. Poseen “In­munidad Parlamentaria” de la que abusan y/o hacen mal uso.

La “Inmunidad Parlamentaria” en muchos casos se ha convertido en “Impunidad Parlamentaria”, dado que no pueden ser procesados ni presos sin previa auto­rización del Congreso o de la Comisión Permanente, desde que son elegidos hasta un mes después de haber cesado en sus funciones, ( es el caso del aun Congre­sista, Benicio Rios Ocsa de Alianza Por el Progreso-Plata como Cancha); excepto por delito flagrante, caso en el cual son puestos a disposición del Congreso o de la Comisión Permanente dentro de las veinticuatro horas, a fin que se autorice o no la privación de la libertad y el enjuiciamiento.

SI no tenemos representantes cusqueños en el Congre­so, como evidencia el artículo 93 de nuestra Carta Mag­na, para que utilizan y gastan tanto dinero en viajes a nuestra región e informes relativos al procesamiento de demandas, cuando esta representación es más, un sim­ple contacto con los ciudadanos, que no nos sentimos representados por los “congresistas cusqueños”, por el Frente Amplio, Wilbert Rozas Beltrán y Edgar Ochoa Pezo. Armando Villanueva Mercado de Acción Popular, Nelly Cuadros Candía, de Fuerza Popular y Benicio Ríos Ocsa, de Alianza para el Progreso.

La representación implica lograr niveles de incidencia sobre nuestras demandas ciudadanas; esto es, lograr que el pedido de los cusqueños, tengan solución satis­factoria, que no se daba por ejemplo para el reinicio de obras de los Mega proyectos, Aeropuerto Internacional de Chinchero-Cusco, Gaseoducto Sur Peruano, Hospi­tal, Antonio Lorena, Vía de Evitamiento y otros proyec­tos paralizados que han paralizado, nuestro desarrollo-económico-social-laboral, con la complacencia de los “congresistas cusqueños”.

La representación involucra defender el interés colecti­vo y general de los cusqueños a través de actividades diversas y, en ciertos casos, intermediando ante otras entidades que sí ejercen funciones ejecutivas. En honor a la verdad existen honrosas excepciones como la del Congresista, Edgar Ochoa Pezo, (que en su oportunidad saludamos), quien con oficio 014-2017-2018-EAOP/CR, insto al Ministro de Transportes y Comunicaciones Bru­no Giufra, explique el estado situacional con plazos de­terminados, del proceso de construcción del Aeropuerto Internacional de Chinchero-Cusco y anuncie el inicio de obras complementarias a la construcción del Terminal Aéreo Internacional, (que ocurrió), para redinamizar el sector laboral y turístico de la Macro Región Sur.

Cuando estamos en una crisis de corrupción política y de gobernabilidad en el Perú, los congresistas cusque­ños y los congresistas del resto de regiones del país, deben asumir con responsabilidad nuestra represen­tación y posición mayoritaria, respecto a la vacancia constitucional por el Congreso de la Republica, del Pre­sidente Pedro Pablo Kuczynski y mañana votar por la Vacancia Presidencial, para sentar un claro y digno pre­cedente, a fin que nadie más se atreva a postular y ser elegido Presidente del Perú, sino reúne las condiciones ético-morales para ejercer el cargo. Sino, seguiremos pensando que: No tenemos representantes en el Parla­mento Nacional. Es nuestra Opinión.

Source: El Sol