“Estas palabras son aseveraciones. Para decir ello, tienen que tener fuentes estadísticas o sustento, dado que la política en una región es demasiado amplia (…) esa frase es dolosa y está dirigida a llamar la atención de sus seguidores”, indica la querella.

Además, Soto Reyes refiere que esa opinión habría dañado su “proyecto de vida”, lo que “trunca el destino de la persona, que le hace perder el sentido mismo de su existencia”. Con ello, el presidente del Congreso exige, además, una reparación civil ascendente a S/100 mil.

Al respecto, la periodista Yessica Bazalar denunció en las redes sociales de su medio de comunicación que la denuncia se trata de una “censura” a la labor periodística.

“De esta manera, Soto pretende silenciar, amedrentar y censurar a los periodistas de Cusco en Portada. ¿Qué desea el presidente del Congreso? ¿Que informemos que es el político más idolatrado del Cusco y del Perú? ¿Qué tiene un tremendo respaldo popular? (…) Ante ello denuncio públicamente al país y a la comunidad internacional que este es un claro acto de censura a la labor periodística y atentado a las libertades de expresión, opinión, información y libre difusión del pensamiento”, indicó.

Al respecto, el Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) indicó que esta denuncia sería la tercera que se presenta contra la referida periodista, ya que otras habrían sido interpuestas “por sus informes sobre presunto actos de tráfico de influencias cometidos por el parlamentario”.

“IPYS recuerda a Soto y demás funcionarios públicos que éstos tienen impuestos un especial deber de tolerancia frente a las opiniones críticas a su actividad pública, precisamente por haberse sometido de manera voluntaria al máximo escrutinio público”, señaló la entidad de prensa.